Momento destacado
El padre Brown investiga al elenco de un programa radiofónico por la extraña muerte de la dueña de la pensión donde se alojaban.
Un concurso radiofónico llega a Kembleford y la señora McCarthy, junto a Bunty, gana una audición para participar como concursante. Los tres miembros del equipo y el nuevo productor, Jeremy, se hospedan en un hostal cuya dueña aparece muerta poco después.
La policía acude al lugar de los hechos y concluye rápidamente que se trata de un trágico accidente: "Ha muerto por inhalación de humo a causa del bloqueo de la chimenea", aseguran.
Sin embargo, el padre Brown no lo ve tan claro. Conocía bien a la dueña de la pensión y sabía que era extremadamente rigurosa con la limpieza de las chimeneas. Además, el hecho de que sus tres gatos hayan sobrevivido ya despierta sus sospechas.
Intrigados, el padre Brown y Bunty se cuelan por una ventana del hostal y, al examinar la chimenea, encuentran una rejilla cubierta de cera y gravilla. El sacerdote deduce que alguien untó las paredes interiores de la chimenea con esa mezcla y luego colocó la rejilla. Al encender el fuego, el humo circuló con normalidad al principio, pero cuando la cera se derritió, la gravilla bloqueó los orificios y provocó la acumulación mortal de humo.
"¿Quién podría querer matar a la casera?", se pregunta Penélope, desconcertada. "Las caseras, como los curas, a veces saben más de lo que deberían", responde el padre Brown enigmáticamente.
Mientras tanto, Bunty se muestra inquieta: ha invitado al equipo radiofónico a alojarse en Montague Hall, y ahora teme que uno de ellos sea el asesino. El padre Brown la insta a actuar con cautela, convencido de que el culpable está entre los visitantes.