Momento destacado
Un convicto es asesinado en una avión al inyectarle hidrógeno en la sangre.
La inspectora Raphaëlle Coste traslada, con la ayuda de un comandante de la gendarmería francesa, a un preso muy peligroso en avión. Asesinó a 8 personas de manera cruel. Las destripó y las ató de manos y pies. Ahora, será juzgado por sus crímenes.
Durante el viaje, el recluso desea ir al baño y Coste le acompaña. En ese momento, se producen unas fuertes turbulencias en la aeronave y se cierra la puerta del servicio donde está el convicto. Al acceder al aseo, se encuentran con el criminal muerto.
Por vía telefónica, el forense dictamina cuál ha sido la causa de la muerte. Todo parece indicar que no ha sido asesinado sino que ha muerto por una descomprensión, pero Astrid no está del todo de acuerdo. Según la documentalista, ha sido asesinado porque le inyectaron hidrógeno en la sangre y con los cambios de presión y de altitud sufrió una hemorragía interna.